Desde que me acabe un libro antes de la mudanza no he vuelto a leer y lo empiezo a echar de menos. Parece increíble como uas hojas de papel pueden hacer tanta compañía y crear tanto cariño a unos personajes ficticios.
Ahora alterno novelas gráficas con libros en inglés y en español. Aunque tengo que controlarme para que no me coman terreno los juegos de las consolas y la televisión por eso ya tengo una habitación donde me puedo dedicar a leer ( a parte de en la cama).
Ayer ya he empezado un libro, esta vez en español , el anterior lo leí en inglés ( I am Legend, nada que ver con la película, nada, nada, nada, el libro mola y el final es completamente diferente y te deja pensativo). Pues empecé "Brooklyn follies" de Paul Auster que me regalo mi hermana Marta porque le gusto mucho, tiene buena pinta.
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